¿Quién dice que los fantasmas no tienen sentido del humor? Los Stevenson fueron una familia muy acaudalada de Boston cuyos miembros se enorgullecían del éxito industrial y la longevidad de la que la mayoría de ellos gozaba.

Este retrato, tomado en 1945, muestra el esfuerzo de reunir a los Stevenson más ancianos junto con el más joven del clan. Emelia, la mujer en el centro de la foto, tenía 102 años y gozaba del honor de ser la 'matriarca', mientras que la pequeña Ofelia era el miembro más pequeño de la familia, con solo año y medio.

De lo que los Stevenson no se dieron cuenta hasta que la foto fue revelada era que uno de sus difuntos se había unido a ellos ese día. James Pullman Stevenson (1835-1932), sentado a la izquierda entre su sobrina Ginny y su primo Alfred, fue fácilmente identificado por varios de los allí presentes y recordado con cariño como un travieso tío conocido por sus bromas y chistes pícaros.