Es terrible abrir los ojos y de nuevo despertar en el más inmenso vacÃo.
Dos ocasiones, he experimentado esa carencia total de todo, cuando tu alma ve cara a cara a la nada, donde no hay luz. Piensas en la razón por la cual existes...¿Hay algún propósito realmente? ¿El propósito siempre es bueno, siempre es digno, la trascendencia debe ser positiva en todo momento...?
Mi cuerpo está hecho pedazos, ya no soy yo, mi alma se ha partido en dos y una parte ha muerto.
Yo no sé qué hago aquÃ. Estoy solo, desnudo, en medio de la nada, sin mayor aspiración que vivir. Qué precaria situación en la que solamente luchas por seguir respirando, por mantenerte completo, por ser...
Aquella vez, que desperté y conocà a mi maestro Ansem, no tenÃa nada. Los hombres pierden todo cuando no poseen recuerdos. ¿Qué soy, sin saber quién fuÃ? No se trata de descubrir la añoranza, o de ese subjetivo patetismo de ver al pasado para ser mejores. Cuando no tienes pasado, tu rostro está blanco, y debes dibujarlo de nuevo. Y asà lo hice, solamente para encontrar de nuevo el vacÃo.
¿Es a esto a lo que me ha arrastrado la búsqueda de mà mismo? A volver a la nada, una y otra vez, como luchar contra un agujero negro. Con el único propósito de vivir, y de construir a pedazos lo que el tiempo y otras circunstancias han deshecho sin piedad.
Xehanort...¿era ese mi nombre?...Ni siquiera estoy seguro de lo que era antes de volver aquÃ, al vacÃo oscuro.
Oscuridad...ni siquiera....ni siquiera estoy en la oscuridad, mi ser está rechazado por la oscuridad, o la luz. Tiemblo, caminando en el borde entre una y otra, sin existir.
Pero ya no hay pena o dolor, porque no siento nada.
¿Perder el corazón me quitará la angustia?
¿El no sentir borrará esta desesperación?....
Lo único que me queda es el tiempo. El tiempo con el que disponga para volver a juntar las piezas de mi alma...antes de que la muerte me alcance.
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